Demasiado efecto en el ombligo y la zona del abdomen para después dejarle el pezón izquierdo con el fogonazo, que parece una cosa rara y, sobre todo, ese antebrazo que si no se le gangrenó fue de milagro.
Etiquetas: Interviú, Laura Manzanedo, No es un pincel. Es un brocha y de las gordas, Unos tanto y otros tan calvo
3 mayo, 2011 a las 6:36 pm |
“Laura Manzanedo. Desnuda en la calle” ¡pues no me extraña! Yo también saldría huyendo por la calle si me sometieran a semejantes torturas. Te depilan el chichi y te dejan una ingle descuadrada, colocada hacia la mitad del muslo; Te dan fogonazos en una teta, pero a la vez te ponen una barra de hielo sobre los pezones para que se te queden las largas puestas; te hacen un torniquete en el antebrazo sin motivo aparente… ¡corre Laura, corre!
3 mayo, 2011 a las 6:43 pm |
jajajaja, pos sí, pos sí, es lo q debería haber hecho. Pq es q además, sale fea d narices, la pobre.