Sin palabras.
Es lo que tiene el viento.
El brasileño es un despropósito, descarado y sin complejos. «Hago churros, ¿y qué?». ¡Con un par!
Y aunque, por comparación, el segundo parece una delicatessen, no lo es. O eso, o es que aquí las olas son muy distintas y por melena escalada entendemos otra cosa.
Aquí la chica con un corte de pelo distinto.
P.D.: Una rodilla me ha tenido fuera de juego 2 semanitas, pero ya sabéis: «mala hierba…», así que, ¡aquí vuelvo!
Me aburre por reiterativo. Ellos ahí, con su barbita de tres días, sus arruguitas, sus manos peludas, etc., etc., etc y ellas, sin embargo, retocadas hasta un punto que parecen maniquís de cera.
Aquí para ver en grande.
Esto no es una portada, es una venganza.
¿En serio es ella? ¿La peñazo de Carmen Machi promocionando el Activia en México? ¿O una abuelita que se encontró Juan mientras paseaba?
Aquí para ver en grande.
¡Valeeeee! ¡Podéis volver a respirar! Por los brazos no os preocupéis, os lo devolveremos al acabar la sesión.
P.D.: Yo creo que todas se las operan en el mismo chiringuito.
Aquí para ver en grande.
También conocido como TOC. Hay a quien le da por lavarse las manos tres veces seguidas, otros no pueden cerrar un armario de la cocina si uno de los botes no está perfectamente alineado con el resto y con la etiqueta frontal centrada o los hay que se vuelven locos sumando y restando números hasta que les da 23. En fin. Nuestro amigo de Forever21 no soporta las rodillas y cada vez que ve una, siente la necesidad imperiosa de hacerla desaparecer. Qué le haremos.
Vía SModa (El País). ¡Gracias Mara!